La medida de inflación preferida por la Fed, el PCE, mostró que la inflación general aumentó 0,2% en octubre, lo que elevó la tasa anual de 2,1% a 2,3%, en ambos casos como se esperaba. La inflación básica, que excluye los precios de los alimentos y la energía, aumentó 0,3% en octubre y 2,8% interanual, frente a 2,7%. Estos resultados eran anticipados, ya que las bajas cifras del año pasado dificultan el avance de la inflación.
Los costos de la vivienda son un factor clave de la inflación, ya que aumentan 5% al año, muy por encima de las estimaciones en tiempo real, como la de 2% de CoreLogic. La vivienda por sí sola representa 0,9% de la inflación básica de 2,8%. Si los precios de la vivienda se ajustaran a los datos en tiempo real, la inflación básica del PCE estaría más cerca de 2,3% y no de los 2,8% que se publicaron.
Los datos de consumo mostraron que los ingresos aumentaron 0,61 TP3T (el doble de lo esperado), el gasto aumentó 0,41 TP3T, lo que fue ligeramente más fuerte de lo que esperaba el mercado, y la tasa de ahorro mejoró de 4,11 TP3T a 4,41 TP3T. Vimos que la tasa de ahorro aumentó porque los ingresos aumentaron a un ritmo más rápido que el gasto. Se espera que el progreso en materia de inflación mejore con los datos de enero en febrero.
A medida que la inflación se enfría, atrae a más compradores a los mercados de bonos, lo que empuja los precios de los bonos hacia arriba y las tasas hipotecarias a largo plazo hacia abajo.
Fuente : https://bit.ly/3Vq16rc
Por: jon iacono